Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2018

INMOLACIÓN

Con esta vocación de mártir me encuentro por la vida maltratada obligada a pasar al bando contrario oculta la misión de ser humana fervorosa y pasional criatura consumida en la llama de la otra mitad. Me enfrento al blanco disfrazada de negro; tiño al negro con matices de blanco… Mi alborada y mi noche se funden en mi pubis y no penetra luz donde la carne luce sus rojos pasionales. No hay pasaporte rojo o negro para esta identidad atravesada por este gran amor que me ha quebrado en pedazos de acero y pan trocados: hirientes y nutricios al mismo tiempo. Debo enroscar la serpiente que repta mientras galopa el potro de la misión que oculto. Pisar como elefante cuando miento y ocultarme en las sombras como un cuervo para borrar las huellas de la inmolación. Ahora te echo en los brazos de mis enemigos disfrazado el dolor en cruel indiferencia mientras siento que mil dagas de hierro se hunden en mis carnes divididas. Tarde comprenderás que eras mi Patria, y mis secretos sólo te protegieron.

TEATRO

Preparada locación lágrimas hay en tus ojos no hace falta la actuación sé que estudiaste teatro. Engañador tu papel ganaste mi devoción creyéndome que eras Dios ciega hice todo por ti. La certeza de tu amor falso, mentiroso y cruel fue dolor el descubrir: representas un papel. Ensayado, dominado actuado una y otra vez, en horas de madrugada con público vulnerable: mujeres, primero madres. Todos los premios del drama para una víctima falsa verdugo de capa blanca sádico, tenaz llorón… Hasta que cae el telón y aprendo que eres actor en proscenio viejo y sabio; sin orquesta, apuntador. Ayudado por la esclava repitiendo el estribillo conquistas, matas y escapas. De premio tu simulacro. Tras la máscara, no hay nada. Busca otro público ahora no encuentro arte en tu acción se te olvidó el parlamento. Eres fracaso total aunque tú sigas diciendo que en mí reencarnó Medea El Padrino, aquí eres tú. ©Leibi Ng