OLVIDO Mi lengua está prisionera entre dientes porque he prohibido que salga algún sonido si tú sospechas que por ti me muero el amor mío lo escondo cuerpo adentro. Fuiste y eres la brasa de mis días la luz de mis mañanas y mi vida; yo a ti quería darte por entero el cuerpo, el alma y todos mis suspiros. Por ti sitiada mi ciudad incendiada por ti vencida en apagado orgullo triste elección que pago demudada. No hay más hombre que tú. A ninguno quiero. Por eso callo de acción y de palabra Por eso muero envuelta en el olvido. ©Leibi Ng