Entradas

TEMPO

Imagen
A Harry a quien empecé a querer a través de su inmenso amor por Martha Isabel Rivera-Garrido “Todo conspira para fingir que existe” , Cirlot De cara al escrutinio estoy sobre la sombra. Quieren investigarme en un espejo roto, quebrado en el azogue devaluado en la imagen. Me resisto al asedio sitiada por las pérdidas no hay en mis ojos lágrimas ni triángulos, ni objetos... solo nubes de aumento. Quieren dimensionarte. Aspiro a tener flores manando de los dedos que perfumen la tarde. Busco abono en la brisa que me trae mensajes… La mariposa gira como un fuego ambulante. Partir siempre es pasaje abierto que convida a marcharse y yo quisiera irme detrás de tu celaje. Como una saltamonte estoy verde esmeralda y la lluvia reluce sobre este par de alas… La voz dice: “No ahora.” Quedo a la espera entonces con la mirada mansa sobre las casas limpias, los techos a dos aguas, diseños que creaste como un dios con su arte que se prodiga todo explicando en las clases. El oráculo gira sobre la malaqu...

SIEMPRE EXTRAÑA

Imagen
A J. que ama demasiado Olvídame en el Metro como a un libro. No permitas que nadie me devuelva. ¿En qué lugar? Donde el vagón se rompe, lejos de tus dos ojos que han mentido. Alejada de Dios, que sin ser tuya pisoteada por mil, como un repudio, la tristeza redonda en arandela querrá romperse como una quimera. Y es por permanecer así humillada por lo que el trajinar convierte en alas el destino final de desterrada… Rosa mustia de espinas despojada. Pero se queda en mí tanta palabra: demencia de perderme, siempre extraña. ©Leibi Ng

La deseada

Imagen
Ella dice que no, que mejor sola pero su cuerpo habla y otra cosa pregona. Su espejo la disfraza, no se ve como es. Una sensual consciente con poros anhelantes y la vida latiendo temiendo en el secreto la sequedad que avanza.. Se muestra cada día como se le permite; aparentando dicha o un júbilo discreto. Exhibe mil sonrisas y apertura a la vida pero yo sé que adentro hay lágrimas sepultas. Cada imagen reafirma su soledad brillante cada verso, su angustia sofocada y distante Penélope o Medusa en ella se acorralan ni admite ni confirma ni cede ni reclama. Cada curva lasciva es un beso no dado Los cabellos, los labios, los ojos, las orejas... El pecho se despliega, doble página abierta. Todo en ella es entrega: -Mírame, soy la fruta deliciosa que anhelas. Presta estoy a tu abrazo. Me muero por ser tuya. Y así pasan los días, con su contradicción. Es "perfecta" da charlas, enseña a ser feliz. Y cual Pierrot oculto en un hogar desierto se muere por vivir. ©Leibi Ng

Querer, no querer

Imagen
  Ni trébol ni pata de conejo un choque de dos vidas o de más una piedra de río y un premio inesperado cataclismo De pronto era amor y también era odio Maldito entre los dientes suplicio hecho de sombras Colapsó de contrarios / estalló como un Nova explotó en reperpero de rayos y de enojos El llanto formó el mar / y el mal el sedimento Hizo hoyos en la tierra y espadas en las rocas Cortó con la impotencia los fieros arrecifes Pulió las caracolas con la arena Doblegó las angustias de las olas Madera de náufragos fue su única respuesta. Deseándose la muerte / para que no murieras Aniquilándose para salvarla a ella Dejándose morir para poder tenerla... Predicho en el futuro de finales felices Se cercenaron vivos devorándose muertos como si no supieran que todo estaba escrito. Agosto 29/2022

Sin edad

Imagen
Escenario Pabellón Jeannette Miller, FILSD2023. Aidita Selman SIN EDAD Comencé a coleccionar imágenes creando álbumes. Uno de ellos se llama “Soledad deseada”. Transmite la taciturna quietud de la luz sobre las cosas. Lo fijo que adquiere movimiento con el paso de otras cosas. El tiempo que transcurre llevándose el silencio suspendido… La iluminación que cambia con las horas… Las sombras que se acomodan en los resquicios… El sonido que se muestra o se esconde sin contar hasta diez… La belleza que me hace mirarme por dentro. Pendiente de corregirme a mí en mi desafuero, la vida que no me exige más que un respiro por segundo, arrastro mis pendientes, sin palanca, sin fuerzas, sin oprobio. Rodeada de tanta cosa inútil, evoco a cada paso un esqueleto armónico que sostiene mi inercia. Quien fui, quien soy y quien seré aún suspendida a mi rígido escrutinio. Toda la soledad que he deseado defendida contra los otros:sus acciones, sus ruidos, sus pensamientos. Entonces me doy cuenta del reducto...

PANDEMIA

Imagen
  Furini. Cabeza de mujer «Viviremos dentro de los límites y moriremos dentro de la          inmortalidad ¿no es injusto? Viviremos gozando la inmortalidad y moriremos dentro de los límites. HORIZONTE. Choi Seung-Ho. Autobiografía del hielo PANDEMIA Desde el fondo donde descender ya no puedes la tristeza domada y los latidos detenidos esperando un solo signo un peldaño de ascenso en la remonta para escapar de todos los lamentos la insuperada herida el dolor que no cesa la confianza dispersa y la desesperanza. Sobrevives por su Alta Gracia a pruebas de silencio y abstención con la penitencia del tiempo detenido y el mañana en penumbras. Y sin embargo, lo divino te absuelve. La fuerza misteriosa que cohesiona trozos deshechos la brisa que mueve las ramas en las copas de los árboles el vuelo de las mariposas y el polvo de sus alas la luz de las luciérnagas y la sed de atraparlas la dulzura de la miel en la punta de la lengua y el aroma de las flores en la nari...

Ensuciar

Imagen
  Garabatear ensuciar la pureza de lo blanco que anhela lo sublime. Marcar con signo estupefacto e imperfecto el sueño de un poema. Llenar de llanto el precoz verso incapaz de tocar los sentimientos por su psicopatía. Intentar sacar del alma esta tormenta y no poder hablar ensuciando con letras inconexas esta agua que no piensa. ©Leibi Ng

Herencia capital

Imagen
  Cual padre paranoico reiterando las mañas remarcando las huellas con persistencia y tino de camino sin fin permanecen las cosas sobre las que navega sin nave repitiendo del Cristo los pies en lo intangible que se mantiene a flote convidando el asombro. Es eso que transcurre que fluye aunque no mane que valoran cual oro pero oro no es. Un camino infinito hecho con eslabones  en certezas bordados, pérdidas invisibles, pero frágiles lágrimas o pompas de jabón. Todo el mundo lo tiene y todos dilapidan especialmente yo. Quienes llevan agendas saben de lo que hablo si queda sin hacerse, la cosa no cuenta como un hecho y pasa a los pendientes, igual de acumulados. Preciso, rencoroso, mudo, cruel e implacable parece detenerse cuando chocan las almas asunto del destino o de física cuántica que unos llaman amor. Sigue a sus tres cabezas: hombre, toro y león guadaña parricida, impasible matón. Al final, él te espera sentado en el panteón. La ilusión siempre viva te hará sentir que eres...

Cuela luz

Imagen
  Remedio Varo: "Cazadora de astros" Sobre ruedas va, colando luces. Hermana con la brisa que entrecoge. De vocación dual: risueña y triste cerrada y a la vez al mundo libre. Sube y baja en vaivén el tiempo esparce: barrotes de metal, también de aire tejida por la urdimbre de su talle. La puerta abierta es sólo un requisito en lo intangible: que en su interior la vida se acomode. ©Leiby NG Colando luces
 No es solo crecer en medio del caos. La dependencia y el desconocimiento la hoja en blanco que es la infancia cuando nadie te explica ni te apoya y el mar de emociones bramando… Observar a otros se convierte en rito. La literatura reemplaza la vida y las palabras imitan a la acción. El joven Werther con su desventura se reitera con sus botas marrones y su chaleco amarillo. El amor imposible, el alma gemela, el negocio viable… Descubrir paso a paso nuestro propio sentir en un paisaje ajeno. ¡Bendita pandemia! Un parón del mundo ha resultado un viaje. Pero nada encaja en el paisaje y el tren se aleja separándome de mí.

Era que no

Imagen
  Era que no quería inesperadamente un hado se posó en medio de los labios. Silencio inexplicable pendiente de un misterio el mundo suspendido al paso de un segundo y tu mirada en mí y mi alma dentro tuyo. Adormecida Cual resignada lluvia no hay nada que ofrecer en resistencia sí una pausada tregua mientras tanto Vendrá la aurora para recuperar la voluntad perdida ese instante indomable que controlas y serás nuevamente tú, la única, la autora original fiel a ti misma. Todo será recuerdo y aguacero. ©Leibi Ng

Tiempos

Imagen
  En el pasillo, cuadros torcidos y en mi memoria el humo asciende como una torre hacia las nubes. Se funde el tacto con los aromas, colores, brumas, planos, esferas... pero el recuerdo juega a esconderse en grietas fijas. Rincones que recorro tras los fantasmas, (que no otra cosa son las acciones que ya pasaron) y allí se esconden para asustarnos en una infancia congelada. Todo se asocia, todo se hermana: rostros, palabras, voces, amagos... Nadie quiere olvidar lo que se olvida, aunque el diario vivido no pierde páginas, no hay duda de que las letras terminan ilegibles por el llanto. Y está lo contenido: lo que no se dijo, lo que no se hizo... De lo íntimo no se habla pues queda disociado; aunque se haya vivido en compañía, se evoca en tiempo solitario tan adentro, tan escondido como el secreto, como el pecado. Seguros de que elegimos quedarnos con lo mejor y que el tiempo devorara lo podrido. @Leibi Ng

Transparencia

Imagen
Con las manos en el agua... viajo en ondas. Me hago pura. Con las manos en el agua me desbordo en yin y en yang. Ritual que me abre las puertas, siete chacras y un prisma. La luz nace libre y tierna como el agua. Mi sangre se encoge y la piel se arruga como si quisiera agarrar luz desde siempre inapresable. Yo anhelo ser como ellas: como el agua con la luz. ©Leibi Ng

La tía en la memoria

Imagen
  Era un tiempo de sol y pueblo en los tejados un baño para todos a cielo descubierto una pluma demócrata  que no negaba el fluido y unas vacas lejanas en un llano sin cerros. Siempre de bicho raro, buscaba el aislamiento debajo de una mata  dibujando las sombras y allí iban a encontrarme  chiquillos parlanchines a quienes una «china»  les parecía muy rara. Era un tiempo alejado de todas las pasiones nadie sabía de heridas ni traición o zarpazos y sí, mucho de risas, chismes, chistes y cuentos. Gorgojo en habichuelas no nos quitaba el sueño aunque el rebuzno épico  de burros en la noche en el rancho lograba alborotar a todos. Era un tiempo con tía rodeada de muchachos tan buena, tan chistosa, tan repleta de vida... Hoy recuerdo ese afecto  que nos salía del alma en la pradera limpia del patio de mi tía. Siempre evoco las risas, los susurros, los besos, el baño para todos... y me pregunto dónde quedó tanta inocencia buscando en las arrugas del rostro ca...

No soy yo

Imagen
  El banquete de Platón En ese instante del sueño fortuito yo no era yo, la que te quiere siempre. En cambio sí la dueña avergonzada de un corazón inmerso en el orgullo. Tu presencia rehuí para escapar ilesa, de grosería vestida. Y es que esto del amor hace de leona herida una gata vulgar presa del miedo de perder voluntad, humillada en lo cierto de amarte sin remedio.. Leibi Ng

Algunas de las Antologías en las que aparece mi poesía

Imagen
 

Mirada

Imagen
  «El amor es esencialmente un milagro». Miau, el chico secreto Si miras desde atrás al horizonte, el sol se oculta en destellos de fuego pero el agua que viene nos tragará humillándonos en arena. Eso sí, ni tú ni yo tenemos miedo al rugido del mar ignoramos el amenazante vuelo de las gaviotas la cercanía de pequeños cangrejos hormigas caribes la brisa fría... Perdidos, tú en mis ojos y yo en los tuyos, provocamos esta parálisis total que siendo clímax se parece a un final. ®Leibi Ng

En horas de la noche...

Imagen
  Este patio agoniza la auyama se arrastra en una reverencia a la pesada sombra rosal de bayahibe no pretende las flores incapaz de crearlas sin un baile de abejas. El perro se agiganta lo mismo que un espectro en la pared del fondo suspirando paciente en la serenidad. Como una solterona la orquídea me contempla en su tarro de inconmovible espera y me siento indefensa ante tanta penumbra sin recordar que al cielo no lo puedo engañar. Cuando llegue la aurora y el ruiseñor despierte en mis sueños, su canto, me dará libertad. ©Leiby Ng

Jugaba con el alma

Imagen
  Su nombre era una s y en sus pupilas oscila el azul como si viera el mar sin horizonte. Supongo que había cobre entre sus uñas o sal debajo de su axila como un país con minas sin fronteras. Jugaba con el alma buscaba al niño ido que perdió en el cortijo. A veces olía a viñas, otras a orujo o vodka pero siempre besaba con sabor a romero De su risa salían pelis para la siesta, de vaqueros e indios Rezumaba ternura aunque era un hombre grande y aún con uñas pintadas era un chico muy guapo. Por alguna razón llegaba a mi en su tinta cada vez que escribía mensajes a su amada y a miles de kilómetros se encendía mi pantalla. ©Leiby NG

Viaje

Imagen
Ninguno de nuestros pequeños gestos sobrevive. Ni un opaco destello de las intensas miradas que un día nos fundieron. No hay aroma de hogar, ni palpos enlazados en la penumbra del mediodía. La cotidiana entrega que pasó de ser pura a la desesperanza. Ahora no hay emoción en el recuerdo Tal como se ve, un film que no nos interesa cuando llega la noticia de esperada muerte. Abordo de nuevo el tren que atraviesa el tiempo. Por mis ojos transcurren los paisajes deformes. Intenso tragaluz que devora y devuelve a la que fui, a la que soy, a la que se convierte… Animal despojado de autodefensa que escapa de la disolución y pone fin al ruido de su propio interior. Al final quedo libre de la pasión, la lujuria, el veneno… y en medio del dolor siempre sabré quién soy. ©Leibi Ng